INVESTIGACIÓN SOVIÉTICA EN ARMAS BIOLÓGICAS
La Unión Soviética no es el único país ni el primero en la
investigación de armas biológicas, pero es el que ha tenido el programa más grande y más complejo. Diferentes
programas y agencias con una larga trayectoria y algunos accidentes que
comienza antes de la II Guerra Mundial y que no desaparece hasta finales de los
años 70.
Primera fase
La andadura comienza en 1925 con una agencia
militar química y con un programa que pretendía encontrar escudos químicos contra las
transmisiones de enfermedades infecciosas. Consiguen buenos resultados combatiendo
el tifus en la II Guerra Mundial.
Pero desde el inicio, además de buscar vacunas,
también comienzan a trabajar en la línea ofensiva ya que, para poder estudiar las
formas de defensa, hay que crear primero la enfermedad. Se piensa que la URSS
realizó los primeros experimentos en humanos expandiendo de forma voluntaria
el virus del cólera.
Cuando el ejército alemán invade la Unión Soviética experimentan con
la tularemia o fiebre de los conejos. Una de las tesis que explica lo ocurrido
en el cerco de Stalingrado en 1942, durante el que se estima que hubo 100.000
casos de tularemia, es que aviones soviéticos rociaron al enemigo con polvo que
contenía restos biológicos contaminados con el patógeno.
Segunda fase
Al final de la II Guerra Mundial se sospecha
que el contacto con científicos japoneses hechos prisioneros facilita a los soviéticos conocimientos
sobre el ántrax, la aerosolización o las fiebres hemorrágicas. Comienzan a elaborar armas biológicas con enfermedades
virales, como es el caso del ántrax y consiguen manejar la toxina botulínica buscando causar la
muerte instantánea por parálisis de órganos vitales.
Un accidente en una isla del mar de Aral en
1972 causó la muerte de tres personas por viruela, cuando la Unión Soviética ya había conseguido erradicar
la enfermedad. Mientras estudiaban la dispersión de las armas biológicas a cielo abierto las
medidas de seguridad fallaron. Una técnico que realizaba un muestreo para otros
fines científicos cerca del lugar donde estaban experimentando con la viruela se contagió iniciando así el último brote de viruela
en la URSS.
Tercera y última (¿?) fase
A partir de los años 70, mientras se firmaban
tratados para la no utilización y no investigación de armas biológicas, la URSS no cesó su actividad. Es la fase más ilegal de todas.
Empiezan a utilizar biotecnología, es decir,
modificaciones genéticas para conseguir que los patógenos sean más resistentes a los
antibióticos y para que la transmisibilidad sea mayor.
En 1979 ocurre otro accidente. En este caso,
una fuga de ántrax en una fábrica de Sverdlvosk. Habían conseguido liofilizar la toxina y al parecer, por un fallo en uno de
los filtros de secado de ántrax, escapó polvo que el viento llevó hasta otra fábrica próxima provocando la muerte a más de 100 trabajadores.
Tras la ruptura de la Unión Soviética nadie sabe con
certeza cuál ha sido el destino final de todos los programas, agencias e
investigadores implicados. Se supone que cepas de viruela se encuentran hoy en
día en
laboratorios muy vigilados.
Fuentes: https://www.eitb.eus/es/radio/radio-euskadi/programas/la-mecanica-del-caracol/detalle/5415800/programas-guerra-biologica-urss-viruela-al-antrax/
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